Las fiestas navideñas son un momento especial para disfrutar y crear recuerdos mágicos en familia. Sin embargo, estas fechas también pueden ser algo desafiantes, especialmente para los padres y madres que se enfrentan a momentos estresantes, como las preparaciones de las festividades, las disputas en casa o con algunos familiares o el agobio de hacer maletas en caso de realizar alguna salida.
En este post, explicaremos algunas estrategias prácticas para mitigar ese estrés navideño, involucrando a toda la familia, fomentando los valores positivos característicos de estas fechas y aprendiendo herramientas para manejar algunas situaciones ¡Sigue leyendo para encontrarlas! 🎄🌟
👨👩👦👦 Involucrar a toda la familia en la preparación:
Implicar a todos los miembros de la familia en la preparación y la planificación de estas fiestas permitirá una mejor distribución de la carga que lleva asociada, y además puede contribuir a crear un sentido de protagonismo y de participación.
Además, muchas veces esta participación conjunta consiste en un verdadero tiempo de calidad en familia, realizando actividades que implican cooperación y colaboración entre los miembros.
¿Cómo pueden ayudar los hijos/as en la preparación?
Un ejemplo de ayuda de los más peques puede ser involucrarlos en la elección de la decoración, el diseño del menú que se va a comer, o la organización de actividades especiales.
En este sentido, puedes encontrar gran variedad de recursos en línea que ofrecen ideas, desde recetas sencillas hasta manualidades navideñas que pueden realizar en familia. Por ejemplo, crear juntos tarjetas de felicitación navideñas para enviar a seres queridos, o hacer manualidades para decorar la casa. ❄️
Dependiendo de cómo sean nuestros hijos e hijas, especialmente de su edad, esta ayuda puede o bien facilitarnos la preparación navideña, o bien alargar el tiempo necesario de la misma , pero sin duda será mucho más gratificante compartir también el proceso de crear y preparar las navidades en familia, aportando el sentimiento de protagonismo ya comentado.
Es necesario escuchar y valorar las distintas opiniones 💬🗨️
Si bien los padres y madres podemos tener ideas muy rígidas sobre cómo celebramos la navidad, escuchar y atender las opiniones de nuestros hijos/as es clave para una parentalidad positiva.
Esto significa flexibilizar en ocasiones nuestros planes, según sea necesario, teniendo en cuenta diferentes necesidades y deseos. Quizás un niño/a más pequeño no tiene la capacidad para mantenerse sentado/a y tranquilo/a en una mesa durante horas esperando a que el resto de comensales termine, o un adolescente quiere empezar a compartir algunos momentos de estas fiestas con su grupo de amigos en vez de con la familia extensa.
Esto no implica tener que ceder o permitir todo, sino entender que algunas veces sus necesidades y deseos no van a ser los mismos que los nuestros, y que podemos negociar un punto intermedio, o al menos dedicar un tiempo para escuchar sus argumentos y acompañar sus emociones desde la comprensión y el cariño.
Así, no solo se fortalece la conexión familiar, sino que también enseña a tus hijos la importancia de escuchar, empatizar y cuidar.
La importancia de asumir lo imperfecto:
Un consejo clave para estas navidades es el aceptar que no todo saldrá como esperabas. El hogar es un escenario donde suceden imprevistos y sorpresas continuamente, y puede ser frustrante agarrarse a la idea de una navidad perfecta que salga completamente según lo planeado. En estos momentos es importante recordar que las celebraciones pueden ser imperfectas, pero lo más importante es el amor y los momentos compartidos con tus hijos. Aquí, la flexibilidad y la paciencia son clave ❣️
El mejor regalo: tiempo de calidad
Reemplaza la presión por regalos materiales con el regalo más valioso: tiempo de calidad. Esto significa dedicar momentos a leer juntos, jugar, contar historias o crear rituales familiares (por ejemplo, encender velas, dejar zanahorias a los camellos o ponerse un jersey navideño). Visitar lugares festivos, como mercadillos navideños, pistas de patinaje sobre hielo, o ver las luces de navidad también puede ser una experiencia significativa que fortalezca los lazos familiares.
Mantener rutinas sí. Flexibilizar, también:
La temporada navideña, llena de festividades y celebraciones, a menudo nos lleva a abandonar nuestras rutinas del día a día 🗓️
Sin embargo, aunque pueda resultar complicado, es esencial intentar mantener rutinas en medio del caos navideño, ya que proporcionan estabilidad y bienestar tanto para los padres como para los hijos e hijas.
Es posible equilibrar la diversión con hábitos que fomenten el bienestar de toda la familia, recordando la importancia de ser flexible con las mismas ya que no siempre podemos ser nuestra versión más sana, descansada, deportista y saludable.
¿Cómo lo hacemos?
🕥Horarios flexibles: En lugar de abandonar por completo las rutinas, adapta tus horarios a las festividades. Permite cierta flexibilidad, pero mantén un equilibrio estableciendo horarios de comidas y descanso que se ajusten a las nuevas actividades festivas.
🍎Alimentación saludable: Durante la navidad es común enfrentarse a una avalancha de turrones, roscones y otras comidas tradicionales que suelen ser más copiosas que lo que solemos comer. Es completamente normal comer más que en el día a día, o comer alimentos menos saludables, pero puedes intentar equilibrar esta alimentación manteniendo también opciones saludables. Por ejemplo, incorpora frutas frescas y verduras en el menú. Si planificas las comidas con anticipación, te será más sencillo incluir estas opciones saludables y nutritivas en el menú de las festividades, tratando que sean a la vez deliciosos y festivos.
🏃♀️¿Ejercicio en navidad? ¿Y por qué no? ¡Incluye la actividad física como parte de las festividades!. Realizar actividades en familia, como caminar después de la cena, practicar deportes al aire libre o incluso bailar juntos, no solo promueve los beneficios de la actividad física, sino que también refuerza los lazos familiares.
💤Descanso de calidad: Aunque las vacaciones pueden alterar las rutinas del día a día y especialmente las nocturnas, es importante priorizar tanto nuestro descanso como el de nuestros hijos e hijas. Trata de mantener un horario de sueño constante, incluso si las actividades se prolongan. Un buen descanso es esencial para mantener la energía y controlar las emociones y el estrés, lo que permitirá afrontar de mejor manera los desafíos asociados a estas fechas.
Mantener la paz en casa: cómo afrontamos las discusiones familiares 🙌
Evitar los desacuerdos o comentarios desafortunados de otros familiares
En muchos casos, se producen comentarios por parte de nuestros familiares que nosotros/as queremos evitar delante de nuestros hijos. Una primera estrategia es anticipar la posibilidad de que ocurra. Si ya conocemos las dinámicas familiares y podemos identificar posibles puntos o temas de tensión, estaremos más preparados para abordar estas discusiones con paciencia y empatía.
Por ejemplo, quizá hay algunos temas determinados con algunos familiares que te gustaría que se realizaran de forma diferente (por ejemplo, comentarios sobre el físico, las relaciones afectivas, o la orientación sexual). Una buena idea puede ser hablar previamente con estos familiares, y tratar de acordar unos límites.
Otra opción, si no puedes evitar estos temas, y te parece importante, es hablar con tus hijos en privado. Si ellos tienen algo que ver y algo que opinar, podéis decidir cómo manejar algunas conversaciones contando con sus necesidades y su opinión.
Ante la confrontación, dale una oportunidad a la escucha activa: Asegúrate de comprender el punto de vista de los demás antes de responder, y recuerda que quizá tu objetivo no es llevar la razón o ganar una disputa, sino tener una cena agradable con tu familia. En estos casos, la empatía y la comprensión pueden reducir la intensidad de la conversación, y además servir de ejemplo para tus hijos e hijas. Recuerda que somos una fuente de aprendizaje y la forma en la que resolvemos conflictos también lo es. 💕
Elige tus batallas, ya que no todas las discusiones merecen tu atención. Dirige la conversación hacia temas más positivos. Comparte anécdotas divertidas o recuerdos alegres que ayuden a desviar la atención de los temas conflictivos. El humor puede ser una herramienta poderosa para desarmar situaciones tensas y cambiar la atmósfera del lugar.
¡Recuerda! La Navidad es una época para la conexión y la celebración, y encontrar formas de superar las tensiones fortalecerá esos lazos familiares.
Afrontar las fiestas desde una parentalidad positiva implica involucrar a la familia, fomentar valores y manejar el estrés con empatía y amor.
De parte del equipo del SAF, aprovechamos para desearos unas felices navidades llenas de momentos mágicos en familia 🎁☃️❄️🎄💚